EDITORIAL BUENAS NOTICIAS AGOSTO 2015 ESPAÑOL / ITALIANO
En
Venezuela, agosto es un mes de vacaciones escolares. Mucha gente aprovecha para tomar un merecido descanso,
en especial quienes están en el ámbito educativo. El sacerdote italiano Luigi
Giussani afirmaba que las vacaciones son “el tiempo de la libertad”, porque es
cuando podemos decidir qué hacer, a qué darle prioridad en nuestra vida y cómo
usar el tiempo; es por ello que el descanso no debería coincidir con la
ausencia de propuestas, de estudio, lectura, reflexión y para algunos también la
opción de seguir trabajando. El “no hacer nada” es algo que una persona no
logra mantener por mucho tiempo, algo se inventa para mantenerse ocupado. Eso
lo vemos en nuestros abuelos que se sienten mal cuando no les dejamos hacer
nada, porque no quieren “jubilarse” de la vida; incluso hemos visto con
nuestros propios ojos como la supuesta ociosidad de los adolescentes, es
vencida con una propuesta fascinante que los reta a usar todos sus talentos en
una pasantía o trabajo en vacaciones.
El trabajo como actividad humana, más allá de las modalidades de empleo o emprendimiento, incluyendo desde la ama de casa hasta el artista, es una verdadera posibilidad de descubrimiento de sí mismo, es la ocasión de crecer y servir al prójimo.
En ese sentido el trabajo voluntario, no remunerado, es fascinante. Gracias a la Cámara de Comercio, Industria y Agricultura Venezolano – Francesa, algunos ejecutivos de empresas han comenzado su voluntariado como tutores de nuestras Emprendedoras del Chocolate, gracias al trabajo de los voluntarios de Ford Motor de Venezuela se ayudó a la primera cohorte del programa Conduciendo tu Futuro con clases de reforzamiento académico, y con los voluntarios de KPMG se han realizado y se están planificando nuevos cursos de acompañamiento.
En Trabajo y Persona cada vez más somos un instrumento para dar oportunidades a personas que no las han tenido, permitimos que jóvenes o mujeres que están más vulnerables que otros puedan ser protagonistas de sus propias vidas y de su desarrollo integral. Con estas actividades donde se involucran voluntarios de las empresas, nos damos cuenta que también le damos la oportunidad a ellos de trabajar de forma gratuita y expresar lo mejor de sí mismos, porque el hecho de darle la oportunidad a alguien de poner sus conocimientos e involucrarse en el proyecto de otro, es una forma de favorecer lugares de encuentro y espacios de crecimiento recíproco que tanto necesita nuestro país.
El trabajo como actividad humana, más allá de las modalidades de empleo o emprendimiento, incluyendo desde la ama de casa hasta el artista, es una verdadera posibilidad de descubrimiento de sí mismo, es la ocasión de crecer y servir al prójimo.
En ese sentido el trabajo voluntario, no remunerado, es fascinante. Gracias a la Cámara de Comercio, Industria y Agricultura Venezolano – Francesa, algunos ejecutivos de empresas han comenzado su voluntariado como tutores de nuestras Emprendedoras del Chocolate, gracias al trabajo de los voluntarios de Ford Motor de Venezuela se ayudó a la primera cohorte del programa Conduciendo tu Futuro con clases de reforzamiento académico, y con los voluntarios de KPMG se han realizado y se están planificando nuevos cursos de acompañamiento.
En Trabajo y Persona cada vez más somos un instrumento para dar oportunidades a personas que no las han tenido, permitimos que jóvenes o mujeres que están más vulnerables que otros puedan ser protagonistas de sus propias vidas y de su desarrollo integral. Con estas actividades donde se involucran voluntarios de las empresas, nos damos cuenta que también le damos la oportunidad a ellos de trabajar de forma gratuita y expresar lo mejor de sí mismos, porque el hecho de darle la oportunidad a alguien de poner sus conocimientos e involucrarse en el proyecto de otro, es una forma de favorecer lugares de encuentro y espacios de crecimiento recíproco que tanto necesita nuestro país.
EDITORIALE IN ITALIANO
In Venezuela, ad
agosto ci sono le vacanze scolastiche. Molta gente ne approfitta per prendersi
un meritato riposo, specialmente coloro che lavorano nell’ambito educativo. Il
sacerdote italiano Luigi Giussani affermava che le vacanze sono “il tempo della
libertà”, perché è quando possiamo decidere cosa fare, a cosa dare la priorità
nella nostra vita e come usare il tempo; è per questo che il riposo non
dovrebbe coincidere con l’assenza di proposte, di studio, lettura, riflessione
e per alcuni anche dell’opzione di continuare a lavorare. Il “non far niente” è
una cosa che una persona non riesce a mantenere per molto tempo, si deve
inventare qualcosa per mantenersi occupato. Lo vediamo nei nostri nonni, quando
ci restano male se non facciamo far loro niente, perché non vogliono “andare in
pensione” dalla vita; abbiamo anche visto con i nostri occhi come la supposta
pigrizia degli adolescenti viene vinta da una proposta affascinante che li
sfida a usare tutti i loro talenti in uno stage o un lavoro durante le vacanze.
Il lavoro come
attività umana, anche oltre le solite modalità di impiego o impresa, spaziando dalle casalinghe all’artista, è una vera
possibilità di scoperta di se stesso, è l’occasione di crescere e servire il
prossimo.
In questo senso
il lavoro volontario, non retribuito, è affascinante. Grazie alla Camera di
Commercio, Industria, e Agricoltura Venezuelano-Francese alcuni amministratori
di imprese hanno cominciato un volontariato come tutor delle nostre Imprenditrici
del Cioccolato; grazie al lavoro dei volontari di Ford Motor Venezuela abbiamo
aiutato il primo gruppo del programma Guidando il tuo Futuro con dei corsi di
rafforzamento accademico, e con i volontari di KPMG sono stati realizzati e si
stanno organizzando nuovi corsi di accompagnamento.
A Trabajo y
Persona ogni volta di più siamo uno strumento per dare opportunità a persone
che non le hanno avute, permettiamo che giovani o donne che sono più
vulnerabili di altri possano essere protagonisti delle loro vite e del loro
sviluppo integrale. Con queste attività dove si coinvolgono volontari di
imprese ci rendiamo conto che diamo anche a loro la possibilità di lavorare in
maniera gratuita e esprimere il meglio di se stessi, perché il fatto di dare
l’opportunità a qualcuno di mettere le sue conoscenze al servizio e di
coinvolgersi nel progetto di un altro è una forma di favorire quei luoghi di incontro e spazi di crescita
reciproca di cui ha tanto bisogno il nostro paese.
Comentarios
Publicar un comentario